Hoy los pastores que van presurosos hasta BelΓ©n, nos recuerdan que debemos con prontitud para encontrar a JesΓΊs envuelto en paΓ±ales y recostado en el pesebre. Estamos llamados a vivir la esperanza y a descubrir en una ternura de JesΓΊs reciΓ©n nacido, la alegrΓa de la SalvaciΓ³n.

